Bienvenidos

Viajero,

Hasta el último clavo de esta casa se colocó pensando en ti. Todos trabajamos para que fuese perfecta, para que cuando te sientes o enciendas el fuego, cuando abras la puerta, sientas que has llegado a casa.

Otros la habitaron ayer, otros vendrán mañana, como tú buscando paz y felicidad. Así que ya formas parte de esa larga cadena que une el pasado con el futuro de estas paredes. 

Pero no tengas prisa, el tiempo pasa aquí tan despacio que casi puedes oírlo. Aprovéchalo y vuelve si has sido feliz, si en algún momento las maderas, los muebles de esta casa, la cal de las paredes o el aire entre las ramas convirtieron  en algo que crees digno de recordar.

Ahora, sigue en paz tu camino...